Conozca que dice la etiqueta del Agua Mineral

abril 12, 2013

El etiquetado de una botella de agua mineral natural es importante porque nos informa sobre su tipología, procedencia, características y beneficios para nuestro organismo.

El agua mineral natural es un producto alimenticio y como tal debe cumplir un gran número de normativas que aseguran que llega a nosotros en perfectas condiciones. Como parte de estos requisitos, el etiquetado cumple una función fundamental ya que proporciona al consumidor toda la información exigida por la legislación. A través de la etiqueta podemos saber qué tipo de agua estamos bebiendo y su procedencia, un dato esencial pues su origen conforma la “personalidad” del agua mineral natural, convirtiéndola en un producto único.

Por otro lado, la etiqueta también ofrece información relativa a las características y propiedades naturales y saludables del agua mineral natural. Menciones como “de mineralización muy débil”, “bicarbonatada” o “indicada para dietas pobres en sodio”, con las que ya estamos familiarizados, se realizan según los criterios fijados para cada composición.

El Codigo Alimentario nos da las siguientes pautas para aprender a leer correctamente las etiquetas de las botellas de agua mineral natural:

1. Denominación bajo la que se comercializa el producto. Esta denominación está doblemente regulada por la legislación específica de las aguas envasadas y, dependiendo de la clase de agua envasada, nos indica si se trata de agua mineral natural, agua de manantial o agua potable preparada, la las llamadas mineralizada

2. Su composición. Muestra los componentes presentes de forma mayoritaria o aquellos que caracterizan al agua mineral natural, los cuales permanecen estables a lo largo del tiempo. En función de la cantidad de minerales disueltos en el agua, , distinguimos varias categorías: agua de mineralización muy débil, agua oligometálica o de mineralización débil, agua de mineralización media y agua de mineralización fuerte, en función del residuo seco.

3. Lugar de procedencia. Señala el lugar geográfico (término municipal y provincia) en el que se encuentra ubicado el manantial o punto de captación del agua.

4. Fecha de consumo preferente. Las aguas envasadas no caducan. Sin embargo, se recomienda consumirlas preferiblemente antes de la fecha marcada por razones organolépticas.

5. Conservación. Con el fin de que el agua mineral natural mantenga todas sus características organolépticas, es aconsejable conservar las botellas en un lugar limpio, fresco, seco y preservado de olores agresivos y protegidas de la luz solar.

El agua mineral natural se conserva intacta desde su origen, la Naturaleza, hasta que llega al consumidor, conservando todas sus propiedades naturales y saludables una vez envasada. Por ello, se recomienda consumir el agua mineral sin hielo, pues éste altera su composición original. Una manera ideal de tomarla y poder apreciar su auténtico sabor, es servir las botellas frías pero sin exceso, entre 11 y 14 grados el agua sin gas y entre 6 y 8 grados para el agua con gas. Por último, aconsejamos que la botella siempre se abra en nuestra presencia, en el caso de tomarla en un establecimiento y no rellenar los envases con otro tipo de productos diferentes al agua original.

Seguinos en la red

             

Leave a Reply